Abogados para recurso de apelación

Una sentencia desfavorable no es el final. Analizamos a fondo tu caso y planteamos recursos de apelación sólidos, estratégicos y bien fundamentados para darle la vuelta al proceso.
Abogada de Javaloyes Legal escucha con atención a un cliente durante una reunión en su despacho profesional.

Confía en nosotros para presentar tu recurso de apelación

Un recurso de apelación es mucho más que un trámite: es la oportunidad de corregir errores judiciales, reevaluar pruebas o garantizar que la justicia se ajuste a la legalidad. Ya sea en un caso civil, laboral, penal o contencioso administrativo, en Javaloyes te ofrecemos una evaluación transparente y honesta desde el primer momento. 

Analizamos tu sentencia con claridad, explicándote las posibilidades reales de éxito, porque creemos que la confianza se construye con sinceridad.

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Contacta sin compromiso

Te escucharemos para conocerte y analizar tu situación. Valoraremos una primera consulta informativa sin coste. Queremos que tomes decisiones informadas, con honestidad desde el primer minuto.

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Evaluamos los detalles de tu caso

Si tu caso es viable, te explicamos las opciones legales y el coste con total transparencia. Trabajamos solo en lo que dominamos y siempre con presupuesto claro, sin sorpresas ni letra pequeña.

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Representación a tu medida

Cada caso es distinto, por eso diseñamos una estrategia legal pensada solo para ti. Si hay margen para una solución extrajudicial, la exploramos. Y si hay que litigar, lo hacemos con rigor.

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Te acompañamos hasta el final

Una vez definido el camino, preparamos tu caso a fondo: analizamos todo y construimos los argumentos. Y lo más importante, te acompañamos en cada paso para que entiendas el proceso y te sientas seguro.

Tipos de recursos de apelación

El recurso de apelación es un recurso ordinario que permite impugnar una resolución judicial ante un tribunal superior. Su finalidad es que un órgano de segunda instancia revise el fondo del asunto: tanto la valoración de la prueba como la aplicación del derecho.

En función de la jurisdicción, existen varios tipos:

  • Recurso de apelación civil: contra sentencias dictadas por los juzgados de primera instancia en asuntos de familia, herencias, reclamaciones de cantidad, contratos, etc.

  • Recurso de apelación penal: contra sentencias de juzgados de lo penal o resoluciones que afectan a la libertad del acusado, la legalidad del procedimiento o la imposición de penas.

  • Recurso de apelación contencioso administrativo: contra resoluciones de juzgados que han juzgado actos de la Administración, como sanciones, licencias, responsabilidad patrimonial o personal funcionario.

  • Recurso de suplicación: en materia de despidos, prestaciones o conflictos laborales, ante los Tribunales Superiores de Justicia.

En todos los casos, el tribunal superior puede confirmar, modificar o revocar la decisión inicial, por lo que redactar un recurso sólido y bien fundamentado es clave para cambiar el rumbo del procedimiento.

Qué apoyo brindamos en un recurso de apelación

Intervenimos en la preparación y presentación de recursos de apelación ante los tribunales competentes, asegurando que cada argumento esté fundamentado en una estrategia jurídica precisa y adaptada a las particularidades de tu caso.

Podemos ayudarte en:

  • Redacción y presentación de recursos de apelación en jurisdicción civil, penal, laboral o contencioso administrativa

  • Análisis de la sentencia recurrida para detectar errores jurídicos, incongruencias o falta de motivación

  • Impugnación de apelaciones contrarias (cuando has ganado en primera instancia y te han recurrido)

  • Asesoramiento en medidas cautelares durante la tramitación del recurso

  • Diseño de una estrategia argumental ajustada a la jurisprudencia actual

  • Gestión de plazos, subsanaciones y preparación del expediente para la segunda instancia

Una mala desfavorable no siempre es definitiva. Nuestra especialización en derecho procesal, combinada con un enfoque humano, nos permite construir recursos de apelación rigurosos, claros y personalizados, maximizando las posibilidades de que tu caso sea reconsiderado con justicia.

Cuándo procede un recurso de apelación

El recurso de apelación procede cuando la parte que se siente perjudicada por una resolución judicial considera que se ha producido:

  • Una incorrecta valoración de las pruebas.

  • Una vulneración de derechos procesales.

  • Una aplicación errónea de la ley o la jurisprudencia.

  • O simplemente quiere agotar la vía judicial antes de acudir a instancias superiores como la casación o el amparo.

Para que el recurso sea admisible, deben cumplirse ciertos requisitos:

  • Que se trate de una resolución susceptible de apelación (no todas lo son).

  • Que se interponga dentro del plazo legal (habitualmente, 20 días hábiles).

  • Que se presente ante el mismo órgano que dictó la resolución.

  • Que se abone, en su caso, la tasa judicial correspondiente.

No animamos a recurrir por recurrir: solo cuando creemos que podemos ofrecer al cliente una oportunidad sólida de obtener un fallo más justo.

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años de experiencia

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Reseñas de 5 estrellas

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Sabemos que dar el primer paso cuesta. Por eso, puedes contarnos tu caso a través del formulario, y estudiaremos tu caso sin ningún compromiso.





    Preguntas frecuentes

    Es un recurso ordinario y devolutivo que permite impugnar una resolución dictada en primera instancia para que un órgano judicial superior la revise por completo (hechos, pruebas y derecho aplicado).

    Está regulado en los artículos 455 a 467 de la Ley de Enjuiciamiento Civil y en los preceptos equivalentes de los demás órdenes jurisdiccionales.

    Procede contra:

    • Sentencias y autos definitivos dictados en primera instancia.
    • Autos que causen indefensión o impidan continuar el proceso.

    No cabe apelación contra las sentencias de juicio verbal cuando la cuantía no supera 3.000 €. En penal, contencioso administrativo y social existen reglas específicas, pero en todos los casos debe tratarse de resoluciones no firmes y la ley debe permitirlo expresamente.

    • Procesos civiles y contencioso administrativos: 20 días hábiles desde la notificación de la resolución.
    • Procesos penales: 5 días hábiles.
    • Procesos laborales: 5 días hábiles.

    El escrito de interposición se presenta ante el mismo órgano que dictó la resolución, indicando los fundamentos y, en su caso, solicitando pruebas para la segunda instancia.

    El plazo depende de la carga del tribunal y la complejidad del asunto. Como referencia, los tribunales provinciales suelen dictar sentencia entre 6 y 12 meses desde la elevación del recurso; en jurisdicciones saturadas o asuntos complejos puede superar el año y medio.

    La tramitación se acorta si no hay petición de vista y las pruebas están completas.